Introducción
El inicio de 2024 registró una disminución en el ritmo de las exportaciones brasileñas del complejo de la soja. La comercialización se desaceleró debido a una serie de factores, como el retraso de la cosecha en Brasil y las proyecciones para la cosecha en Argentina, que han influenciado el comportamiento del mercado internacional.
Las Exportaciones de Soja en Grano Sufren una Caída Expresiva
Mientras que en enero del año anterior las exportaciones de soja en grano alcanzaron casi 3 millones de toneladas, en enero de 2024 este número se desplomó a aproximadamente 1 millón de toneladas, representando una reducción de dos tercios en el volumen. Los productores están optando por retener sus granos, a la espera de una valorización en los precios antes de efectuar las ventas.
La Harina de Soja Presenta una Leve Reducción en las Exportaciones
Las exportaciones de harina de soja tuvieron una disminución menos drástica, pasando de 1,8 millones de toneladas a 1,7 millones de toneladas. La menor caída, cuando se compara con la del grano, se debe a la necesidad de funcionamiento ininterrumpido de las industrias procesadoras. Para mantener la salud financiera, estas fábricas necesitan mantener su capacidad productiva en operación, lo que dificulta el almacenamiento de la harina en comparación con el grano. A pesar de la disminución, la harina continúa siendo negociada a un ritmo constante, aunque inferior al esperado.
El Aceite de Soja Mantiene el Volumen Exportado, pero por Debajo del Pico Reciente
El aceite de soja, por su parte, no registró grandes fluctuaciones en enero de 2024, manteniendo las exportaciones en torno a 70.000 a 80.000 toneladas. Sin embargo, en relación con el período de pico durante el conflicto en Ucrania (2022/2023), hubo una caída notable. La demanda de alternativas al carbón en Europa impulsó los volúmenes exportados en aquel momento, pero, con la normalización de la demanda, las exportaciones se ajustaron a un nivel inferior.
Los Productores Aguardan una Mejora en los Precios
La perspectiva es que los productores brasileños estén postergando las ventas, aguardando una recuperación de los precios. La indefinición de la cosecha argentina y los impactos de la sequía en la cosecha brasileña contribuyen a esta postura. Adicionalmente, la reducción en el valor de la tonelada en el mercado internacional, con una caída de aproximadamente 5 dólares por tonelada en comparación con el año anterior, refuerza la decisión de los productores de mantener la soja almacenada, esperando por condiciones de mercado más favorables.
Próximos pasos
La retracción en las exportaciones del complejo de la soja en enero refleja un momento de cautela y expectativa en el mercado. Los productores brasileños, ante un escenario de incertidumbres climáticas y fluctuaciones de precio, adoptan una postura conservadora, aguardando mejores oportunidades para comercializar su producción.
