Introducción
La propuesta de gravar la exportación de carne bovina surge como un intento de contener el alza de los precios en el mercado interno. Sin embargo, la medida, ya probada en otros países como Argentina, demuestra ser ineficaz y perjudicial para toda la cadena productiva brasileña, exigiendo un análisis más profundo y la búsqueda de soluciones más inteligentes.
El Fracaso Argentino: Una Lección Ignorada
Argentina sirve como un ejemplo claro de los efectos negativos de la imposición de impuestos a la exportación de carne. La implementación de medidas restrictivas, buscando el control de precios internos, resultó en desestímulo a la producción, caída en la oferta y, consecuentemente, aumento de los precios. Argentina, otrora gigante en la exportación, vio su participación en el mercado global reducirse drásticamente, un escenario que Brasil necesita evitar.
Consecuencias en Cadena: Producción Desestimulada y Mercados Perdidos
La ganadería es una actividad que exige planificación a largo plazo. La imposición de impuestos desestimula la inversión, llevando a la reducción de la producción y, futuramente, a la escasez de carne. Además, la medida perjudica la reputación de Brasil como proveedor confiable, abriendo espacio para que otros países ocupen mercados importantes, como China, EE. UU. y Medio Oriente, que Brasil tanto luchó para conquistar.
Medidas Eficaces: El Camino para un Crecimiento Sostenible
En lugar de soluciones paliativas, Brasil necesita políticas de Estado que promuevan el crecimiento sostenible de la ganadería. Esto incluye garantizar seguridad jurídica para los productores, crear seguros agropecuarios contra pérdidas, invertir en infraestructura para reducir el "costo Brasil" e incentivar la modernización tecnológica del sector para aumentar la productividad.
El Futuro de la Carne Bovina Brasileña: Liderazgo con Responsabilidad
Brasil tiene todas las condiciones para mantener el liderazgo en el mercado global de carne bovina. Sin embargo, para ello, es crucial evitar medidas que comprometan la producción y la competitividad. El foco debe estar en crear un ambiente de negocios estable y favorable, que impulse el crecimiento del sector de forma sostenible.
Próximos pasos
Gravar la exportación de carne no es la solución para el alza de los precios, sino un agravante del problema. Brasil necesita aprender de los errores de otros países e invertir en estrategias que realmente beneficien la ganadería y, consecuentemente, al consumidor brasileño, además de reforzar alianzas y la buena reputación en el mercado externo, mostrándose como un proveedor estable.
